jueves, 11 de febrero de 2010

Mundo

Porque cada vez que te ríes,
sonríes,
cantas,
tocas,
me miras,
hablas,
vuelvo al mundo.
Y no se está tan mal aquí.

Porque cada vez que me abrazas,
piensas,
duermes,
sueñas,
me acaricias,
callas,
vuelvo a la vida.
Y me quiero quedar junto a tí.

No hay comentarios: