lunes, 2 de febrero de 2009

Yo, me, mi, conmigo.

Puede ser que mi vida sea una constante cuesta hasta llegar al Olimpo donde quizás me debo encontrar con Zeus y vivir feliz y tranquila. Rectifico. Puede ser que CREA que mi vida es una constante cuesta hasta llegar al Olimpo donde quizás me debo encontrar con Zeus y vivir feliz y tranquila. Y todo se queda en eso, un creo, una duda, un engaño a corto o largo plazo al fin y al cabo. Quizás el problema es mi optimismo, quizás mi fe ciega en la vida o simplemente mi manera de ser, mi modus operandi que me mentiene (o mantenía) a salvo de todo lo que ocurre en mi alrededor, cómo una manta cuando tienes frío y te calienta.
Justo ahora me doy cuenta realmente lo que comporta todo esto, y lo único que hago es derrumbarme todavía más. "Hola, bienvenida al mundo real, a partir de ahora sufrirás y llorarás más que nunca." es la frase que tengo grabada en la cabeza, y está claro que en almenos un tiempo no me la podré sacar. Pero, ¿todo esto que comporta?, ¿que debo hacer?, ¿que debo pensar?, ¿cómo debo actuar?. Mi cabeza no se puede aclarar ni escribiendo, cosa que hace darme cuenta que es todavía más grabe de lo que pensaba, así que ya he hecho suficiente daño a la humanidad, y sobretodo, a mi misma.
A la mierda yo, yo, y sobretodo: yo.

No hay comentarios: